Desmontando mitos

DESMONTANDO MITOS escrito por Claudia Sánchez Redondo, logopeda de XiCaEs

MITO: El autismo es una enfermedad

REALIDAD: El autismo no es una enfermedad, es un trastorno de origen neurobiológico que está relacionado con el desarrollo del sistema nervioso y del que actualmente se desconocen las causas. La persona con TEA no está enferma por lo que este trastorno le acompañará en todas las etapas de su vida.

MITO: Las personas con TEA (Trastorno específico del lenguaje) no se comunican

REALIDAD: La variabilidad entre las personas con TEA es muy grande y cada uno presenta unas características diferentes. Se comunican pero no todas lo hacen de la misma manera. Igual que hay algunas que se comunican con lenguaje oral, otras precisan de apoyos y recursos como Sistemas Alternativos o Aumentativos de Comunicación.

MITO: La parálisis cerebral es una enfermedad neurodegenerativa

REALIDAD: La lesión no es progresiva. Es una enfermedad estática, si va a peor ya no es una parálisis cerebral. El niño que sufre parálisis cerebral va cambiando porque crece aunque la lesión que padece será la misma con 5 meses que con 20 años.

MITO: La parálisis cerebral sólo se produce por problemas durante el parto

REALIDAD: La lesión cerebral resultante de falta de oxigenación del cerebro puede ocurrir antes, durante o bien meses o años después del parto. Las secuelas de otras patologías como pueda ser infecciones cerebrales (meningitis), embolias, derrames y hemorragias cerebrales… tienen una sintomatología parecida a la parálisis cerebral.

MITO: Existen diferentes mitos en el Síndrome de Down

REALIDAD: El Síndrome de Down ocurre por la presencia de un cromosoma 21 extra por lo que no existen diferentes grados de S. de Down simplemente se tiene o no se tiene. Cada persona con S. de Down tiene unas características físicas, unas capacidades y una personalidad propia influida por la herencia genética y los factores ambientales y educativos.

MITO: Hay una predisposición genética a tener hij@s con Síndrome de Down

REALIDAD: En el 99 % de casos el síndrome de Down se produce de manera completamente aleatoria y no está demostrada la existencia de algún factor genético que predisponga a tener un hijo o hija con síndrome de Down.

MITO: Las personas con S. de Down son como niños y se comportan como tal

REALIDAD: Tienen un desarrollo personal, no ligado a las dificultades de aprendizaje, igual que el resto de la población y pasan por las diferentes etapas de desarrollo por lo que no es justo tratar a las personas adultas con S. de Down como a los niños.

MITO: La comunicación Aumentativa y Alternativa (CAA) entorpece o evita la evolución del habla

REALIDAD: El lenguaje oral siempre suele ser la primera alternativa y medio de comunicación pero en muchos casos no es posible logarlo o bien, el lenguaje es limitado y no le permite a la persona poder expresarse y comunicarse con el entorno que les rodea. Un niñ@ incapaz de comunicar efectivamente está privado de muchas actividades y sufre riesgo de retraso en el desarrollo cognitivo, social y emocional. Por lo que es importante estimular el lenguaje oral y ver hasta dónde se puede trabajar pero siempre que lo requiera, es necesario establecer un sistema de comunicación alternativo o aumentativo para garantizar una comunicación funcional.

MITO: Los niños necesitan tener ciertas capacidades para beneficiarse con la Comunicación Aumentativa y Alternativa.

REALIDAD: Este es uno de los mitos que más controversia supone en la actualidad. Es importante saber que NO hay prerrequisitos cognitivos u otros que sean necesarios para que un niño use CAA.

Claudia Sánchez Redondo- Logopeda

Grado en Logopedia en la Universidad de Valencia. Especializada en logopedia clínica en daño neurológico y en terapia miofuncional.

Trayectoria profesional: Logopeda en una clínica con niños/as con dificultades de aprendizaje

Actualmente trabaja en Xicaes, tratando con los niños/as que tienen alterada la comprensión y/o producción del lenguaje, el habla, la voz, trastornos orofaciales mediante terapia miofuncional y alteraciones en la deglución.