El edificio Santa Ana (edificio que actualmente  alberga a la Fundación Manantial) se encuentra situado en la calle Ana Nebot (detrás de la estación), en la partida “las soladas”. Es un bello palacete del siglo XIX, construido fundamentalmente de baldosa, madera, forjados de hierro y masonería. El suyo tejado es en forma de pirámide, y entre sus elementos estructurales se pueden destacar los muros rectilíneos, las escalas de baldosa, las fuertes vigas en el techo, la torre elevada del centro y un vallado metálico.

Además  más, presenta elementos decorativos como estucados geométricos en la fachada. La edificación principal consta de 3 plantas sobre rasante, con porches en la parte posterior, aperturas simétricas, una terraza en la planta superior rodeada de rejas y un sótano de menos dimensiones. En total ocupa una superficie construida de 1.250 m2 y rodeada de 6.500 m2 de jardín y huerto.

Esta antigua residencia de época contemporánea se conserva en un estado excelente a causa de sus frecuentes restauraciones, puesto que el que era una casa de ocio se ha usado durante muchos años como residencia de la tercera edad y está considerada patrimonio arquitectónico de Vila-real.

Se trata de un edificio histórico, con un excelente estado de conservación, muy agradable por la calidad de los espacios interiores y exteriores.

Fundación Manantial

Enric Portalés, president de Fundació Caixa Rural Vila-real, José Benlloch, Alcalde de Vila-real, i Francisco Sardina, president de Fundació Manantial, presentant el nou conveni de col·laboració en roda de premsa

Desde enero del 2017, nuestra fundación y Fundación Manantial hemos establecido un convenio de colaboración en el cual se han cedido las instalaciones del edificio Santa Ana para que esta otra fundación pueda desarrollar su actividad social, benéfica y asistencial.

Esta acción social va dirigida a la atención de personas con diversidad mental y la rehabilitación psicosocial y laboral de estas. En concreto, el edificio Santa Ana está destinado a una residencia comunitaria abierta en la que los usuarios podrán entrar y salir con el objetivo de que las personas puedan conseguir el nivel de rehabilitación que los permita reincorporarse a la sociedad. Esta atención es gratuita y está previsto que las plazas sean temporales para que haya una rotación de residentes y puedan resultar beneficiadas el número más grande posible de personas.